24 octubre 2008
URUGUAY VETA A KIRCHNER PARA QUE NO ENTRE EN UNASUR
Jueves 23 de octubre de 2008 |
El gobierno argentino consideró como "un agravio" la decisión de Uruguay de no apoyar la candidatura de Néstor Kirchner a la Secretaría General de la Unión Sudamericana de Naciones (Unasur), siendo prácticamente el único postulante para ese cargo.
Fuentes cercanas al canciller Jorge Taiana informaron a DyN que la actitud de Uruguay "es considerada un agravio a los argentinos, a la Unasur y a los países que apoyan la candidatura del ex presidente Néstor Kirchner".
Veto a Kirchner. El gobierno uruguayo vetó la postulación del ex presidente Néstor Kirchner como secretario general de la Unión de Naciones del Sur (Unasur), por considerar que la tolerancia de su gobierno al bloqueo sobre un puente bilateral, no deja margen para respaldar su candidatura, confirmaron a LA NACION fuentes de la administración de Tabaré Vázquez.
"En un conflicto difícil de entender, los Kirchner no han tenido con Uruguay un trato acorde a lo que este gobierno merece", dijo la fuente que destacó "la paciencia" que Vázquez tuvo ante "una situación de bloqueo fronterizo inadmisible".
La Cancillería oriental recibió una propuesta formal de la candidatura del ex presidente argentino para ocupar la Secretaría General de la Unasur. La postulación había sido hecha por el presidente de Ecuador, Rafael Correa, pero la carta llegó desde Chile, porque la presidenta de ese país, Michelle Bachelet, ocupa la Presidencia del nuevo grupo regional.
El canciller Gonzalo Fernández consultó con el presidente Vázquez para definir la respuesta en el plazo más breve, aunque según las fuentes, ya estaba tomada la decisión ante la falta de respuesta argentina al levantamiento del "piquete" sobre la ruta que en Gualeguaychú da paso al puente con Fray Bentos.
El responsable de la diplomacia uruguaya se había reunido en Nueva York con su colega Jorge Taiana y la propia presidenta Cristina Fernández. Eso fue en setiembre, cuando el canciller Fernández transmitió a Vázquez que la jefa de Estado se había comprometido a tomar medidas para dar por terminado el bloqueo. Eso fue lo que entendió el canciller uruguayo.
Pero pasan las semanas y no hubo acción judicial ni levantamiento del bloqueo, como esperaba la administración Vázquez.
"¿Avalará a Kirchner al frente de un organismo regional cuando como presidente argentino no fue capaz de cumplir el acuerdo de libre circulación que está en el marco del Mercosur?", dijo la fuente del gobierno uruguayo ante la consulta de LA NACION.
La Cancillería comunicó la decisión de veto a los líderes de los partidos de oposición Colorado y Nacional y luego respondió a Bachelet. "No hay condiciones para que Uruguay de su aval a la candidatura de Néstor Kichner", escribió el canciller en la misiva al gobierno de Chile, por su carácter de Presidencia temporal de la Unasur.
Apoyo. En tanto, los líderes de las dos corrientes del Partido Nacional, Jorge Larrañaga y Luis Albeto Lacalle, dieron su apoyo a la medida. En el otro partido opositor, el ex canciller Didier Operti dijo que como suplente de Julio María Sanguinetti, fue informado ayer por el gobierno uruguayo sobre la decisión y consultado acerca de la misma. Dijo que transmitió el planteo a Sanguinetti, que es el secretario general del Partido Colorado.
Operti señaló que como se necesita consenso de los países para una candidatura, este veto uruguayo deja a Kirchner sin chance alguna de que pueda ocupar ese cargo.
Además, afirmó que la actitud que Kirchner ha tenido en el conflicto binacional por las plantas de celulosa, demuestra que el ex presidente argentino no da garantías para que sea avalado en un cargo de representación de la región. "Como ex canciller digo que yo hubiese hecho lo mismo que el actual canciller", dijo Operti sobre el veto a Kirchner.
Informe de Nelson Fernández, Corresponsal de LANACION en Uruguay
Etiquetas: muy bien
23 octubre 2008
UN GRITO DE DESESPERACIÓN Y ANGUSTIA
El estado argentino nació con un gen estafador que se activa periódicamente, no importa quien sea el momentáneo mandamás. El estado es incapaz de respetar al ciudadano, sus derechos y bienes, o se apodera de ellos o los degrada.
Confiscación, estatización, expropiación, devaluación, inflación, cambio de moneda, no pago de deudas, quitas, no actualización de haberes jubilatorios, no pago de reintegros, no pago a proveedores,malversación de lo recaudado por impuestos, retenciones a las exportaciones, Corralito, Korralón etc. etc. etc.
La codicia fue el origen del caos financiero actual. La codicia K va a terminar de destruir a la Argentina. ¿Terminaremos como estado Brasileño?
El costo de los votos del conurbano bonaerense se va a tragar al resto del pais
Los que nunca se salvan
Por Agustín A. Monteverde Jueves 23 de octubre de 2008
De pronto, azoramiento.Desconcierto.Miedo. Sí, miedo es la palabra que mejor define la sensación que inunda a los argentinos, que sabemos muy bien que el "salvataje? "nunciado es simplemente una sustracción por orden de la corona. La versión oficial presenta la "reestatización de las AFJP" como un salvataje del sistema jubilatorio. Pero no tiene nada que ver con eso.
Conviene repasar algunos puntos que muchos olvidan, limitando sus análisis a cuantificar los daños patrimoniales, inmediatos y directos de la fechoría.
En primer lugar, bueno sería que grabáramos en nuestras mentes que los fondos jubilatorios administrados por las AFJP son ?o eran? propiedad exclusiva de sus nueve millones de afiliados. No son fondos de las administradoras: son cuentas individuales de capitalización.
Los titulares de las cuentas son los dueños de esos fondos. No son propiedad de Nación AFJP, o de Consolidar, o de cualquier otra administradora. Son fondos suyos, míos y del resto de los afiliados.
En contraposición, los aportes al sistema estatal de reparto implican una clara y expresa cesión de la propiedad de esos fondos al Estado, que los incorpora al erario público y los malgasta con poco encomiable esmero. Aquí no hay propiedad de los afiliados, sino la esperanza de que los haberes de mañana sean algo mejores que la dádiva mísera que hoy perciben los ?beneficiarios? del sistema estatal.
Tómese nota de que los aportes son percibidos (y gastados) por los gobernantes de hoy, que dejan a los de mañana con la pesada carga de abonar jubilaciones que no otorgaron, con aumentos en subsidios acordados sin que hayan mediado suficientes aportes previos y sin haber tenido parte en aquel despilfarro.
En segundo lugar, todos los afiliados a las AFJP lo son por propia voluntad, ratificada poco tiempo atrás, durante el propio gobierno kirchnerista, cuando se dejó abierta la posibilidad de regresar al sistema estatal. Ante esa perspectiva, hubo nada menos que nueve millones de ciudadanos que votaron por no moverse del sistema privado. Es curioso que la dirigencia oficialista, que tanto empeño pone en manifestar su culto democrático, desprecie la contundente voluntad de esos hombres y mujeres acerca de cómo desean que sean administrados sus propios ahorros previsionales.
Considérese, por último, que la opción que esos argentinos libremente ejercieron, pese al enorme esfuerzo propagandístico montado por el Gobierno, no compromete a terceros ni arriesga otra fortuna que la de sus propios aportes.
Hechas estas puntualizaciones, queda claro que lo que se ha anunciado no es la estatización de las AFJP, sino el acabose de la propiedad privada ?los fondos aportados a su cuenta de capitalización son (eran) tan suyos como los zapatos que usted tiene puestos? y del derecho a elegir. Se trata, pues, de la más flagrante confiscación masiva de patrimonios. Los nueve millones de argentinos ultrajados prueban que es la más grande de nuestra historia, por cantidad de afectados.
Pero el atropello colectivista no queda ahí. Como parte de los fondos administrados fueron invertidos en la mayoría de las grandes empresas locales, la exacción de esos fondos deja al Gobierno como virtual propietario de buena parte del acervo productivo del país y socio privilegiado en todas esas compañías. La confiscación masiva (o, mejor dicho, las más de nueve millones de confiscaciones) de ahorros jubilatorios y de tenencias accionarias deja, pues, a la administración K a medio metro del comunismo. Ni más ni menos...Y si el Congreso aprueba semejante violación, ¿cuánto tiempo resta para que aprueben la apertura y confiscación de las cajas de seguridad? ¿Le parece exagerado? ¿Por qué?
Por cierto que esta expoliación tampoco encaja en lo que llama "expropiación" nuestro derecho, pues ésta debe originarse en una razón de bien público. Ocurre que aquí no se hace en defensa del bienestar general, sino en supuesto resguardo de los mismos expropiados. Es decir, esta expropiación masiva se realiza en contra de la voluntad de los mismos "beneficiarios".
Además de confiscar $ 100.000 millones de ahorros particulares, con esta medida el Gobierno acaba de declarar un nuevo default: más de $ 50.000 millones en bonos serán absorbidos sin compensación alguna (algo así como un canje forzoso con una quita del cien por ciento). Por eso no extraña que los reportes de todos los bancos internacionales recomienden al unísono salir a cualquier precio de activos argentinos.
No se trata, pues, ni de estatizar las AFJP ni de un salvataje del sistema jubilatorio. Los accionistas de las administradoras ya sueñan con las jugosas compensaciones que negociarán con no menos ansiosos valijeros oficiales. Algunos empresarios se ilusionan con que una parte, aunque minúscula, del botín, se convierta en fondos blandos para sus industrias siempre sedientas de subsidios y protección. Los sindicalistas aplauden el despojo de los trabajadores, interesados también en los obsequios que promete el árbol de esta Navidad. Buena parte de nuestros legisladores ya sonríen pensando en la bolsa que traerán los dos reyes magos. Se trata de una nueva y más grande fiesta de despilfarro y perpetuación en el poder. En este "salvataje" está bien clarito quiénes son los que se salvan. Y los que no.
El autor es economista y profesor universitario.
Etiquetas: Dios adónde estás mirando?
22 octubre 2008
EL KORRALITO
Miércoles, 22 de octubre de 2008
EL KORRALITO
JOHN MÜLLER
La Señora K ya tiene su propio corralito. Ha
metido la mano del Estado argentino en los ahorros para la
jubilación que venían acumulando sus ciudadanos en fondos
privados desde 1994. Se ha aprovechado de que la coyuntura es
mala para los fondos de pensiones cuyas cuentas han sido
fuertemente castigadas por la crisis financiera.
Esto lo ha cocinado con las reticencias históricas de la
izquierda hacia la privatización de las pensiones y el guiso
resultante ha sido que el Estado argentino uno de los más
incompetentes del mundo- garantizará desde ahora los ahorros de
sus trabajadores.
En 14 años, los argentinos que se afiliaron a los fondos de
pensiones acumularon 30.000 millones de dólares. El argumentario
oficial señala que en este tiempo los ciudadanos perdieron 5.000
millones de dólares y los gestores de esos fondos ganaron 12.000
millones. Las cifras son dudosas, pero ahí están.
Una crítica similar se oye en Chile, el país pionero en la
privatización de pensiones y jubilaciones. Es verdad que como
hay pocos gestores de fondos de jubilaciones y pensiones esto
facilita que se pongan de acuerdo en las comisiones que cobran.
Nadie lo ha podido probar, pero la similitud de las subidas y
las bajadas hace que la gente crea que esto es así. En realidad,
la gente se cabrea porque no hay competencia. Quiere que haya
más, no menos. Poca vista tienen aquí quienes se dicen adalides
de la libertad pero no quieren dejar de gozar de sus
privilegios.
En Argentina, ahora ya no tendrán ese problema. Los que
apostaron por el sistema de pensiones privado sólo tendrán un
gestor: el Estado. Como se sabe, el Estado argentino es uno de
los administradores más solventes del mundo. Por eso, nadie
sospecha de que la Señora K ha roto la hucha de los trabajadores
porque en realidad el Estado está quebrado.
El BBVA se ha dejado algunas plumas en este saqueo al gallinero
argentino que ha realizado la zorruna Señora K, donde en
realidad los principales perjudicados son los propios
argentinos. Otras empresas del Ibex 35, como Repsol, están
recibiendo un fuerte castigo bursátil debido a esta decisión.
Hace ya mucho tiempo que las firmas españolas (Marsans, Repsol,
Telefónica, etc.) están huyendo de ese avispero sudamericano que
es el país de la Señora K.
Tengo grandes amigos argentinos. Son sensatos, educados y
racionales. Su país es riquísimo y cuando ellos se ponen a
trabajar con reglas claras y estables, su economía prospera de
una manera formidable. No puedo entender cómo, en los últimos 30
años, sólo han tenido un presidente (Raúl Alfonsín) que ha hecho
honor a la racionalidad. No creo que sea una incapacidad
genética, pero algo raro pasa en Argentina que cada equis años
tiene que sobrevivir a un gobernante con tendencias cleptómanas.
Ahora es el korralito de la señora K.
Etiquetas: otra vez Nestor roba a los viejitos